Repasando las 4 ultimas semanas en el cine-forum, el tema de la mujer ha sido el hilo conductor que ha guiado las sesiones y los debates, con Mouchette (Robert Bresson, 1967.), Happy-go-Lucky (Mike Leigh, 2008), la cual por cierto me perdí, Un cuento de invierno (Eric Rohmer, 1992.) y por ultimo Gertrud (Carl Theodor Dreyer, 1964.) hemos visto a mujeres-niñas enfrentarse a un mundo hostil el cual, bajo mi personal punto de vista son incapaces de comprender, mujeres fuertes con ganas de vivir y de sentir que solo buscan la felicidad tal y como dijo el compañero Rodrigo, jóvenes-madres viviendo durante 5 años de la fuerza de un amor de verano, barajando opciones de pareja que de antemano no la van a convencer, mujeres fuertes y decididas que aparentemente nos parecen frágiles e indecisas, por ultimo hemos visto y en este caso pongo la palabras del mismo Dreyer mujeres que, “……en Gertrud se siente dicha intolerancia, pero aquí aparece a través de la propia Gertrud que nunca aceptara nada que no sienta ella misma y que exige, en cierto modo, que todos se inclinen ante ella”
Dicho esto y después de buscar “modelos” de entender el amor, otras formas de vida y de sentir, que sean lo suficientemente libres y fuertes para no traicionar sus ideales o como para romper con los convencionalismos, no parcialmente como se ve en Gertrude sin no totalmente, llegamos a la conclusión de ver UNA MUJER PARA DOS.(Desing for living, Ernst Lubitsch 1933).
Escasas son el numero de películas de la historia del cine a las cuales nos referimos con”es una película que envejecido bien”, “el tiempo a pasado bien sobre ella”, etc.…. Pero se podría decir que podemos contar con los dedos de manos las películas que después de 80 años de su realización no solo siguen resultando modernas, si no que probablemente dentro de 20, 30 o 40 años mas seguirán resultando actuales, respecto a la manera de abordar el tema en el sentido moral, tanto como, a la modernidad técnica con la que están resueltas varias secuencias y plano secuencias que podremos ver.
Desing for living, titulo original, es una película aparentemente pequeña y sencilla pero que esconde varios niveles de lectura, desde el plano cómico, superficial y banal de las convenciones sociales situado en la piel de la película hasta el sentido de seriedad, profundidad y esencialidad de la vida, mucho mas escondido en el latir del corazón de cada milímetro de celuloide de este film.
Una película profundamente divertida, llena de símbolos, dobles sentidos y quizá arquitectura y pintura, en definitiva composición, con un final lleno de ingenio y vida, brillantez y alegría, un canto a la vida y a la sexualidad, que ha servido de referente, como siempre fue Ernst Lubitsch, maestro de maestros, para a mi modo de ver el final del algunas grandes mitos de la historia del cine como podría ser Con faldas y a lo loco ( Some like it hot, Billy Wilder, 1959.) mucho mas conocida por el publico general, que la película que nos ocupa, pero igual de divertida, cierto es como todos sabemos que no se puede hablar de Billy Wilder sin hablar del llamado “Lubitsch touch”
Imagenes del divan y la cama en Design for living.
Escena final de Desing for living
Debate, polémica y diversión garantizadas.